Roma es nuestra ciudad favorita. Definitivamente. ¿Por qué? Pues porque mientras paseas por sus calles te parece estar en una película de romanos o de Fellini, la comida es deliciosa, la gente amable, hay miles de cosas que ver y hacer y vayas donde vayas siempre encuentras algo maravilloso y sorprendente! ¿Te parece poco?
“Voy a viajar por primera vez a Roma, ¿qué me recomiendas visitar?”
Esta es una pregunta muy habitual que cada viajero se pregunta antes de visitar Roma. Es cierto que cada viajero tiene sus gustos personales, y en un viaje a una ciudad con tantos atractivos como reúne Roma, cada uno de nosotros centraremos la atención en los rincones de la ciudad que nos resulten más llamativos o interesantes. Hace unos meses os contaba de como pueden llegar desde el aeropuerto Fiumicino al centro de la ciudad y os prometi un articulo sobre que os recomiendo viajar. Aunque tarde demasiado tiempo lo siento amigos. Hoy toca: Roma!!!
Pero eso sí, hay determinados monumentos y lugares que son imprescindibles de visitar en un primer viaje a Roma. A continuación te voy a recomendar 10 visitas imprescindibles para tu viaje a Roma, que puedes muy bien ver en una o dos días. Como puedes suponer, se trata de una selección personal, pero está enfocada a viajeros que tienen un interés general por monumentos y lugares turísticos.
Coliseo Romano / Coliseo de Roma
El Coliseo Romano es el mejor exponente del poder histórico de Roma y, en la actualidad, la atracción turística más visitada de Italia. El Coliseo es el principal símbolo de Roma, una imponente construcción que, con casi 2.000 años de antigüedad, os hará retroceder en el tiempo para descubrir cómo era la antigua sociedad del Imperio Romano.
Luchas entre bestias salvajes, condenados devorados por las fieras, combates entre gladiadores… Tales fueron los espectáculos que acogió desde su inauguración el Coliseo de Roma, el mayor anfiteatro del mundo romano. Actualmente el Coliseo es, junto con el Vaticano, el mayor atractivo turístico de Roma. Cada año lo visitan 6 millones de turistas. El 7 de julio de 2007 el Coliseo se convirtió en una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.
Foro Romano
Un paseo por estas excavaciones arqueológicas trasladarán a la Roma de la Antigüedad. El Foro Romano es el gran espacio de restos arqueológicos que se extiende junto al Coliseo Romano. Es el lugar donde se desarrollaba toda la vida ciudadana en la antigua Roma: la política, la justicia, el comercio, la vida social y el culto a los dioses. Era el corazón de la Ciudad y está cargado de recuerdos de los principales protagonistas de su Historia.
Verdadero santuario de la Antigua Roma, el Foro Romano es una visita obligada, pero es necesario contar con una buena guía para entender cada monumento: las basílicas, los templos, la Curia del Senado, la Tribuna de oradores o la Casa de las Vestales. Hoy queda poco de todo aquello, y su principal atractivo es poder revivir la gran Historia en los mismos escenarios en que tuvo lugar.
Moisés de Miguel Angel
Muy cerca del Coliseo, con acceso por un pasadizo junto al 215 de la Via Cavour, tienes la posibilidad de ver la imponente escultura del Moisés de Miguel Angel, la cual no deberías dejar de ver en tu primer viaje a Roma. Forma parte del monumento funerario dedicado al papa Julio II que encuentras en el interior de la iglesia de San Pietro in Vincoli, un rincón que pasa desapercibido para muchos turistas.
Plaza de España
Se trata de uno de los lugares más visitados de Roma. La Plaza de España es una de las plazas más conocidas de Roma. Su nombre (Piazza Spagna) viene dado por la ubicación de la embajada española ante la Santa Sede en dicha plaza desde el siglo XVII.
La plaza de España se encuentra en el entorno de muy concurridas calles comerciales con tiendas de marcas, en concreto, la Via Condotti. Su monumental escalinata es lugar de encuentro de romanos y turistas y ha sido escenario de un sinfín de películas. Las escaleras de la plaza, construidas a principios del siglo XVIII para comunicar la plaza con la Iglesia de Trinità dei Monti, son la zona más especial de la plaza.
En el mundo de la moda los 135 peldaños de la escalinata son conocidos ya que en ellos se celebra el desfile Donne Sotto le Stelle. Este acontecimiento se celebra a mediados de julio y hace que la Plaza de España se vista de gala.
Resulta agradable sentarse en las escaleras de la Plaza de España, un lugar de encuentro para los ciudadanos locales y de merecido descanso para los turistas. La fuente situada en el centro de la plaza fue diseñada por Pietro Bernini para el Papa Urbano III. Su construcción concluyó en 1627 a manos de su afamado hijo, Gian Lorenzo Bernini. La Fontana della Barcaccia posee forma de barco y tiene grabados los emblemas de la familia Bernini: soles y abejas.
Fontana de Trevi
Hasta que no llegues a Roma y la veas en directo, no te puedes imaginar la monumentalidad de esta famosa fuente barroca, la Fontana de Trevi. La Fontana de Trevi es la fuente más bonita de Roma. Con unas dimensiones de 20 metros de anchura por 26 metros de altura, la Fontana de Trevi es también la fuente más grande de la ciudad.
Los orígenes de la fuente se remontan al año 19 a.C., época en que la Fontana constituía el final del acueducto Aqua Virgo. La primera fuente fue construida durante el Renacimiento, bajo las órdenes del papa Nicolás V. El aspecto final de la Fontana de Trevi data de 1762 cuando, tras varios años de obras de la mano de Nicola Salvi, fue finalizada por Giuseppe Pannini. Como curiosidad, el nombre de Trevi deriva de Tre Vie (tres vías), ya que la fuente era el punto de encuentro de tres calles.
Sin duda, una visita imprescindible en Roma es esta fuente que fue protagonista de la famosa película de Fellini, la Dolce Vita. Para nosotros la Fontana de Trevi es la fuente más bonita del mundo. Tanto bajo la luz del día, como iluminada con una cálida luz durante la noche, la fontana nunca se encuentra sin compañía.
Un punto que suele empañar el momento de la visita, es que la zona se encuentra repleta de gente que trata de vender rosas de un modo agobiante, pero basta con ignorarlos para continuar disfrutando de un lugar tan especial.
Terraza de las Cuádrigas y el Monumento a Victor Manuel II
En lo alto de la Colina Capitolina, y junto al Foro Romano, se encuentra el Monumento de Victor Manuel II, el cual está coronado por la que se conoce como Terraza de las Cuádrigas. Aquí tienes la posibilidad de subir a la terraza mirador que se comercializa como Roma dal Cielo, donde tienes unas de las mejores vistas panorámicas de Roma, en concreto de la zona arqueológica de la Roma Antigua.
El Monumento Nazionale a Vittorio Emanuele II es uno de los edificios más llamativos de toda la ciudad. Sus impresionantes dimensiones y el brillo del sol reflejado en su blanco mármol hacen que sea el foco de las fotografías de miles de turistas cada día. Fue inaugurado en 1911 para rendir homenaje a Víctor Manuel II, primer rey de Italia tras su unificación.En su interior se encuentran el Instituto para la Historia del Risorgimento italiano y el Museo Central del Risorgimento. Desde 1921 el Monumento a Víctor Manuel acoge la tumba del soldado desconocido, un lugar en el que brilla la llama eterna y se encuentra siempre custodiado por dos soldados.
Plaza Navona
No puedes decir que has visitado Roma si no has paseado por la plaza Navona. Dotada de un estilo barroco muy elegante, la Plaza Navona es una de las plazas más bonitas y populares de Roma y una de las mas bellas de Italia!
Esta plaza es un verdadero conjunto monumental, donde destacan sus fuentes y, en concreto, la de los Cuatro Ríos de Bernini. Sin duda el mayor atractivo de la Plaza Navona son las tres fuentes construidas bajo el mandato de Gregorio XIII Boncompagni.
La Plaza Navona ocupa el lugar en el que se situaba el estadio de Domiciano (Circo Agonal) en el año 86, con espacio para más de 30.000 espectadores, en el que los ciudadanos romanos disfrutaban de los juegos atléticos griegos. Hasta mediados del siglo XIX, cada verano se cerraban los desagües de las tres fuentes y la parte central de la plaza se inundaba para convertirse en “El Lago de la Plaza Navona”.
La plaza está rodeada de restaurantes y terrazas y durante el día hay mucho ambiente. Se trata de una zona muy animada en la que es posible disfrutar de las actuaciones de diferentes artistas callejeros, como magos o bailarines, prácticamente a cualquier hora del día. Los dos edificios más importantes que presiden la plaza son el Palazzo Pamphili y la Iglesia de Santa Agnes.
Panteón de Agripa
En tu viaje a Roma no puedes dejar de visitar uno de sus monumentos romanos más imponentes, el Panteón de Agripa, también conocido como el Panteón de Roma. El Panteón de Roma es la obra arquitectónica mejor conservada de la antigua Roma y una de las obras maestras de la arquitectura de la capital italiana.
La construcción del Panteón actual se llevó a cabo en tiempos de Adriano, en el año 126 d.C. El nombre de Agripa viene dado porque el lugar en el que está construido el edificio actual estaba anteriormente ocupado por el Panteón de Agripa, construido en el año 27 a.C., que quedó destruido debido a un incendio en el año 80 d.C.
A principios del siglo VII el edificio fue donado al Papa Bonifacio IV y éste lo transformó en una iglesia, por lo que en la actualidad presenta un perfecto estado de conservación.
Te sorprenderá ver en directo la famosa cúpula de este antiguo templo de la época romana, la de mayor diámetro en el mundo. En el interior del Panteón se encuentran las tumbas de numerosos reyes de Italia y multitud de obras de arte. El personaje más conocido que se encuentra enterrado en el Panteón es sin duda el pintor y arquitecto renacentista Rafael.
Plaza y Basílica de San Pedro en el Vaticano
Con independencia de las creencias religiosas, viajar a Roma es sinónimo de visitar la plaza de San Pedro en el Vaticano, obra de Bernini, y la imponente Basílica de San Pedro, que conforman un increíble conjunto artístico. La Plaza de San Pedro es tal vez la plaza más conocida del mundo y una de las más bonitas.
La Plaza de San Pedro se encuentra situada en El Vaticano, a los pies de la Basílica de San Pedro. Las dimensiones de la plaza son espectaculares: 320 metros de longitud y 240 metros de anchura. En las liturgias y acontecimientos más destacados la Plaza de San Pedro ha llegado a albergar más de 300.000 personas.
La construcción de la plaza se llevó a cabo entre 1656 y 1667 de la mano de Bernini, con el apoyo del papa Alejando VII. Lo más impresionante de la plaza, además de su tamaño, son las 284 columnas y 88 pilastras que bordean la plaza en un pórtico de cuatro filas. En lo alto de las columnas hay 140 estatuas de santos realizadas en 1670 por los discípulos de Bernini.
En el centro de la plaza destaca el obelisco y las dos fuentes, una de Bernini (1675) y otra de Maderno (1614). El obelisco, de 25 metros de alto, fue llevado a Roma desde Egipto en 1586. La forma más espectacular de llegar a la Plaza de San Pedro es por la Via della Conciliazione, una larga calle que comienza en el Castillo de Sant’Angelo (que si teneis tiempo vale la pena visitarlo).
La Basílica de San Pedro es el edificio religioso más importante del catolicismo. En ella, el Papa celebra las liturgias más importantes y su interior acoge a la Santa Sede. La Basílica de San Pedro tiene una capacidad para 20.000 personas. Mide 190 metros de longitud y la nave central tiene 46 metros de altura. La cúpula alcanza una altura de 136 metros.
Entre las obras de arte que se pueden encontrar en su interior destacan el Baldaquino de Bernini, La Piedad de Miguel Ángel y la estatua de San Pedro en su trono. Esta última tiene el pie derecho desgastado por los besos de los fieles.
Sin duda entrar a la basílica es una de las experiencias inolvidables de Roma. No os podéis perder la subida a la cúpula, desde donde podréis admirar la Plaza de San Pedro y, si el día está despejado, gran parte de Roma. La subida no es apta para todos los públicos, ya que el último tramo se realiza por medio de una empinada y estrecha escalera de caracol que puede llegar a resultar agobiante.
Capilla Sixtina
Considerada como la obra maestra de Miguel Ángel, la Capilla Sixtina es uno de esos lugares que todo el mundo debería ver al menos una vez en la vida. La Capilla Sixtina es uno de los mayores tesoros del Vaticano, de Roma y del mundo en general. Es conocida tanto por su decoración, como por ser el templo en el que se elige y corona a los Papas.
La construcción del edificio se llevó a cabo entre 1473 y 1481 durante el mandato del Papa Sixto IV, a quien debe su nombre actual. El arquitecto encargado de la construcción fue Giovanni de Dolci, siendo la única obra por la que se le recuerda.
Lo que llama la atención de la Capilla Sixtina no es su arquitectura, sino los frescos que recubren por completo las paredes y el techo. Algunos de los artistas más importantes que trabajaron en ella son Botticelli, Perugino, Luca o Miguel Ángel.
¿Y qué más?
Por supuesto, para tu viaje a Roma tienes otras muchas visitas interesantes, pero las que te he indicado son las que considero imprescindibles para decir que has estado en Roma. Si te gusta visitar iglesias, tienes otras grandes basílicas, como Santa María la Mayor, o San Juan de Letrán, o la iglesia de Jesús. O museos, como la Galería Borghese. O encantadoras plazas, como Campo de Fiori. Aqui os dejo con otras fotos:
Pero más que ver muchos lugares y monumentos, lo importante es que disfrutes de tu visita, pues Roma es una ciudad para volver muchas veces. Ya lo comprobarás.